viernes, 20 de marzo de 2009

Guia de lectura para Platón


Platón- República

Libro I

  • Definiciones de Justicia (libro I-IV).
  • Justicia-injusticia
  • Hombre justo-injusto.

Libro II

  • Clase de bienes.
  • Alma en relación a la justicia
  • Origen de la ciudad.
  • Verdadera polis.
  • Ejercicio del propio oficio.
  • Educación de los guardianes.
  • Cualidades de los guardianes.

Libro III.

  • Ejercicio de la mentira
  • Templanza
  • Naturaleza del hombre
  • Relación cuerpo-alma
  • Alma buena
  • Gobernantes
  • Mito de las razas
  • Comunismo de guardianes.

Libro IV.

  • Objetivo de la fundación de la ciudad
  • Clase-felicidad
  • Riqueza-pobreza
  • Unidad de la ciudad
  • Educación
  • Virtudes de la polis (definición de prudencia, valor, templanza y justicia)
  • Partes del alma/funciones
  • Analogía alma-polis.
  • Formas de alma-organizaciones políticas.

Libro V.

  • Formas rectas y buenas-formas viciosas y malas
  • Tres olas
  • Guerra-discordia
  • Conocimiento-opinión-ignorancia.

Libro VI.

  • Cualidades y naturaleza del filósofo
  • Filósofo-gobierno
  • Alegoría del Sol:
  • Mundo sensible-mundo inteligible
  • Idea del Bien
  • Alegoría de la Línea:
  • División de la línea
  • Cuatro operaciones del alma.

Libro VII.

  • Alegoría de la Caverna:
  • Idea del Bien
  • Importancia de la educación
  • Unión Filosofía-Política
  • Método dialéctico
  • Cualidades del filósofo
  • Gobierno de uno o varios filósofos.

Libro VIII.

  • Correspondencia alma del hombre-régimen político
  • Principio del cambio de los regímenes políticos
  • Timocracia
  • Oligarquía
  • Democracia
  • Tiranía.

Libro IX.

  • Placeres y deseos
  • Características del tirano
  • Grado de felicidad y virtud de los hombres
  • Correspondencia partes del alma-partes de la ciudad-placeres-principios de acción

jueves, 19 de marzo de 2009

El libro de Sócrates

El lunes comenzaremos con República, de Platón. Hay que leer los libros I a III, por lo menos. Pueden consultar la guía de lectura disponible en el blog.

Crimen y castigo


Entre tanto qualunquismo con respecto a la cuestión seguridad, se destacan tres noticias: Susi los prefiere verdes, sendo artículo sobre la universalidad de los Derechos y una marcha atrás con la pena de muerte nada menos que en Nuevo México, EEUU.

lunes, 16 de marzo de 2009

Algunas cuestiones para pensar

Bienvenidos/as a la Comisión 12. Hoy en clase vamos a hacerles éstas preguntas para que respondan con lo que ya traen. Luego pueden investigar por su cuenta y ofrecer otras posibles respuestas. Conserven sus definiciones primeras y reléanlas al finalizar la cursada. Y después. Y después también. Porque ser cientistas sociales y no preguntarse cosas como éstas es resignarse frente al ascenso de la insignificancia.

¿Qué es lo justo?

¿En qué grado algo es democrático?

¿Qué es lo público en una ciudad?

¿Qué significa vivir seguros/as?





jueves, 5 de marzo de 2009

SusAnita Bryant

Agitar la necesidad de la pena de muerte es una práctica tradicional de los feligreses del fascismo de sentido común. Dicen hablar desde el sentir del pueblo, pero sabemos que existen razones de moral pública (nuestra Constitución), de razón particular (la mayor parte de los credos) y de eficacia puramente empírica (trabajos científicos) que nos persuaden en contra de una medida semejante.

Últimamente se comentaba, entre personas que leen algo más que carteles, los dichos de Anita Bryant, un personaje nefasto que conocimos gracias a la película Milk. En esas lamentaciones estábamos hasta que la fauna local nos proporcionó una nuestra: Susana Giménez. Se trata de una conductora de televisión argentina que amasó fortunas replicando un programa italiano que tenía en su lugar a Rafaela Carrá, bastante más atractiva y menos estúpida.

Podríamos tentarnos con una falacia ad hominem: impugnarla por lo que es y no por lo que dice. Pero, ¿por qué contentarse con poco si podemos hacer ambas cosas? Por ejemplo, podemos decir que supo ser socia de un cura acusado por el delito de violación y abuso de menores. Y que se vio envuelta en el contrabando de autos para discapacitados y que escondió el de ella en un establo para no pagar impuestos; que contribuyó como pocas a empobrecer con su noventismo el criterio de las doñas rosa que la siguen y sueñan ser como ella . Si les gustan estos refrescos de memoria, visiten el último post de don Diego F. en Mundo Perverso. Pero si quieren seguir con algo que justifique la inclusión de semejante idiota en un blog de teoría política, continuemos.

Esta formadora de sentido común de los homo-videns se indignó por el asesinato de su florista (y es verdad que fue un crimen aberrante). Pero se despachó con una catilinaria bochornosa. Dijo "Terminen con los Derechos Humanos y esas estupideces. Basta con los menores; el que mata tiene que morir." Epa, mejor dedicate a lo tuyo.

1-La Constitución la prohíbe definitivamente, en el art. 18. Y la reforma de 1994 por la que se incluyó la mayoría de los tratados internacionales lo refuerza. No se puede reimplantar sin renunciar a ambas cosas. Sería como abolir la sociedad política.

Dato interesante que debe tenerse en cuenta: esta pena (que por otro lado constituye
un trato cruel y degradante, y también un tormento, cosa que también prohíbe la CN) no sólo la pide la gilada televisiva, los galanes grasas, los juntabichos, y la Radio 10W. En su momento la minoría ilustrada y calificada en leyes también lo hizo. Sucede que se aplicó por primera vez en 1914 (orden conservador), se la eliminó en 1921 (gobierno constitucional), en 1932 la Academia de Derecho (!) recomendó su reimplantación y en 1933 (gobierno de facto) realizaron 5 ejecuciones. Destaco la espantosa recomendación académica, ya sabemos que en otros tiempos se fusiló o se torturó y asesinó sin preocuparse por la legalidad de nada.

2-Es imposible la justificación moral de la eliminación física de la persona humana como pena atribuible a un delito grave o uno común. Descarta todo criterio de proporcionalidad. Si, como muchos filósofos piensan, es imposible la certeza o inaccesible la verdad, es difícil asumir moralmente la ejecución de una persona. Pero si acaso fuese posible la infalibilidad procesal, las razones morales seguirían impugnando la medida.

3-Hay un argumento interesante en Utopía, de Moro. Él señala que si la pena del delito es la muerte, los criminales actuarán con mayor zaña pues deben asegurarse la eliminación del testigo-víctima cuyo testimonio futuro podría enviarlos a la horca.

El típico argumento de la
prevención general negativa sobre el supuesto valor disuasorio de semejante pena es una mentira total y un fracaso notable. Se sabe que antiguamente al menos 2 de cada tres condenados a muerte por distintos delitos habían presenciado antes una ejecución pública. Hoy, en los países donde existe pena de muerte la evidencia marca que su vigencia no redujo la criminalidad. No sirve, muchachos. NO sirve. Salvo que reconozcan su militancia en la más nefasta de las tradiciones de justificación de las penas, la de la prevención especial negativa: caer sobre quienes supuestamente cometieron un delito y proceder a su eliminación o neutralización permanente (hay variantes varias, tirarlo al mar, amputarle lo que haga falta, congelarlo hasta el 2030, sacarle el 75% del cerebro y hacer fertilizante orgánico, etc).

Entonces, tengamos en cuenta algunas premisas:

a) No hay relación entre el derecho penal y la "seguridad". Al menos no como la imagina una parte importante de la ciudadanía.

b) Es falso que el endurecimiento penal genere más seguridad.

c) Es muy probable, al contrario, que mayores impulsos punitivos terminen generando por sí mismos mayor inseguridad (abusos de toda clase, falsedades probatorias, violaciones graves etc. en el proceso).

d) Las recientes reformas manoduristas a nuestro CP, como las del pack blumberg, fueron pésimas e ineficaces.

e) El derecho debe ser una garantía igual para todos (eso beneficia a los sujetos menos aventajados, porque no tienen poder particular). No me detengo en esa burrada de "derechos humanos para los delincuentes", latiguillo de la precariedad si los hay. Pero sí marco un alerta con recientes argumentaciones (otra vez de encumbrados doctores de la ley) que hablan de un derecho aplicable a los ciudadanos y otro distinto y simultáneo que llaman derecho penal del enemigo (la Guantánamo Parade)

Atenti con ésta poesía de la señora Walsh (que publicó cuando el indultador de genocidas y lector de Sócrates comenzaba un sending fruit amenazando convocar a un plebiscito sobre ésta pena):

"Fui lapidada por adúltera. Mi esposo, que tenía manceba en casa y fuera de ella, arrojó la primera piedra, autorizado por los doctores de la ley y a la vista de mis hijos.
Me arrojaron a los leones por profesar una religión diferente a la del Estado.
Fui condenada a la hoguera, culpable de tener tratos con el demonio encarnado en mi pobre cuzco negro, y por ser portadora de un lunar en la espalda, estigma demoníaco.
Fui descuartizado por rebelarme contra la autoridad colonial.
Fui condenado a la horca por encabezar una rebelión de siervos hambrientos. Mi señor era el brazo de la Justicia.
Fui quemado vivo por sostener teorías heréticas, merced a un contubernio católico-protestante.
Fui enviada a la guillotina porque mis Camaradas revolucionarios consideraron aberrante que propusiera incluir los Derechos de la Mujer entre los Derechos del Hombre.
Me fusilaron en medio de la pampa, a causa de una interna de unitarios.
Me fusilaron encinta, junto con mi amante sacerdote, a causa de una interna de federales.
Me suicidaron por escribir poesía burguesa y decadente.
Fui enviado a la silla eléctrica a los veinte años de mi edad, sin tiempo de arrepentirme o convertirme en un hombre de bien, como suele decirse de los embriones en el claustro materno.
Me arrearon a la cámara de gas por pertenecer a un pueblo distinto al de los verdugos.
Me condenaron de facto por imprimir libelos subversivos, arrojándome semivivo a una fosa común.
A lo largo de la historia, hombres doctos o brutales supieron con certeza qué delito merecía la pena capital. Siempre supieron que yo, no otro, era el culpable. Jamás dudaron de que el castigo era ejemplar. Cada vez que se alude a este escarmiento la Humanidad retrocede en cuatro patas."


lunes, 23 de febrero de 2009

El paisajismo en pareja no es delito (ya lo decía yo)


La Cámara Federal sobreseyó a una pareja que tenía en su domicilio cuatro macetas en las que cultivaba marihuana para su consumo personal. En los fundamentos de la sentencia los magistrados coincidieron con el juez instructor en que "la tenencia no afectó ni puso en peligro, siquiera en modo potencial, la salud pública".
Lo veníamos discutiendo en el blog. Ya los jueces señalan que es inconstitucional aplicar penas a personas que posean estupefacientes en cantidades para consumo personal. Y que no se sostiene el argumento de atentado contra la salud pública.
Más que por unas fumatas, yo estaría preocupado por hábitos y sustancias probadamente adictivas y perniciosas, como ésta moda.

sábado, 14 de febrero de 2009

Vó tené la teoría pero yo tengo la prática,

Hoy el sojero matutino The Nation publica un reportaje al Juez de la Corte Eugenio Zaffaroni. Habla de futuros fallos, de la seguridad, de políticos y medios y de criterios penales. El diario de la trompetita difunde algo así como un (balbuceante) contrapunto con el Gobernador Daniel Scioli sobre estos tópicos. Mano dura pero con buena onda, para todos, con una dosis generosa de humor up!

Hay que darle una mano a Michael


Parece que Michael Moore está preparando un documental sobre la crisis norteamericana y pide, a quien los tenga, datos sobre bancos. Acá hay gente que ya tiene maestría y doctorado padeciendo a usureros crediticios.

A propósito: ¿ya vieron sicko?

jueves, 12 de febrero de 2009

Por qué creo que criminalizar a quien posee estupefacientes para consumo personal va contra nuestra Constitución

A propósito del post sobre el multicampeón olímpico que fue fotografiado con una considerable pipeta cargada con gases de THC, y de una preocupada respuesta de Celeste y Anónimo, intentaré dar algunas razones en un tema muy abierto que pone al rojo la hermenéutica constitucional. La cuestión no es moralizar la discusión diciendo si esta bien o si está mal consumir una sustancia psicoactiva sino si es legítimo en un estado de derecho ser penados por ello. Anticipo un supuesto elemental: seguirán existiendo problemas de constitucionalidad con toda norma destinada a incriminar actos que corresponden puramente a la órbita personal.

UNO:
En primer término, conviene tener presente al art. 19 de la CN. Las acciones privadas de los hombres que de ningún modo ofendan al orden y a la moral pública, ni perjudiquen a un tercero, están sólo reservadas a Dios (para quienes crean en él), y exentas de la autoridad de los magistrados (esta es una referencia al legislador. Es obvio que también alcanza a los jueces, pues en una república democrática no puede haberlos sin una ley que les confiera potestad para juzgar; y aquí también debemos tener presente el mandato del art. 18 CN y los tratados internacionales). Es decir, las acciones que no lesionan a otro están fuera de toda injerencia estatal.

Veamos ahora el artículo 14 de la Ley 23.737, Tenencia y tráfico de estupefacientes. En su segundo párrafo dice: "La pena será de un mes a dos años de prisión cuando, por su escasa cantidad y demás circunstancias, surgiere inequívocamente que la tenencia es para uso personal." Celeste se preguntaba cúanto es personal. Bien: 0.68 gramos de marihuana, con su análisis cualitativo -puede variar el peso y la capacidad tóxica-. Esa evaluación, dada cierta amplitud, queda en manos del juez, conforme a las reglas de la sana crítica (art. 398 del CPP).

La tenencia para consumo personal tiene una pena. ¿Cómo fue constitucionalmente posible esto? Es momento de recordar el camino cambiante que sobre este punto recorrió la Corte Suprema (y aquí la ciencia política tiene mucho para decir, me refiero a la facultad judicial de ser intérprete último de la Carta Constitucional, toda una cuestión).

DOS:
En 1978, mientras un Estatuto de la Dictadura era erigido como remplazo de la CN (y todo el andamiaje jurídico se adaptó a esa infamia), el fallo "Colavini" estableció el criterio a aplicar. Ariel Omar Colavini era un joven al que la policía secuestro entre sus ropas dos cigarrillos de marihuana. La causa comenzó el 22 de diciembre de 1976 y llegó a la Corte, que se pronunció el 28 de marzo de 1978. Colavini recurrió al patrocinio de un defensor oficial, que -considerando las circunstancias- hizo lo que pudo y hasta se permitió algunas argumentaciones razonables. El argumento de la condena, en lo esencial, sostiene que la tenencia para consumo personal tambien constituye un peligro para la salud pública. Se supone que la pena castiga una puesta en peligro del bien jurídico salud pública. La Cámara Federal no se privó de recomendar "...cuidarse de los excesos, pues en aras de la libertad puede llegarse al sacrificio de la sociedad" (!) En lo más atróz del genocidio, Segismundo Cortés y Eduardo Servini, jueces de la Nación, los sabios de las leyes, nos hablaban del cuidado de la libertad y de la defensa de la sociedad.

Luego tocó el turno del Procurador General, Elías P. Guastavino: "Al ser la tenencia una condición materialmente necesaria para el consumo, la incriminación de aquélla trae aparejada la imposibilidad de ejercer legítimamente esta última conducta (...) Y presten mucha atención a lo que sigue porque es el núcleo del argumento condenatorio. El 28 de marzo de 1978 la Corte Suprema se expidió sobre el caso. En el considerando 12, sostuvo que "...si no existieran usuarios o consumidores, no habría interés económico en producir, elaborar y traficar con el producto, porque claro está que nada de eso se realiza gratuitamente. Lo cual conduce a que si no hubiera interesados en drogarse, no habría tráfico ilegítimo de drogas."

Es impresionante. La cabeza judicial del país transforma a los consumidores de estupefacientes en cómplices y autores del delito de narcotráfico y a partir de ello, igualándolos, habilita la culpabilidad. Es un fallo digno de una dictadura. Recordemos sus nombres, Adolfo R. Gabrielli; Abelardo F. Rossi; Pedro J. Frías y Emilio M. Daireaux.

Después del 10 de diciembre de 1983 hubo cambios en el Tribunal. Con cinco miembros, la Corte asumió un perfil claramente identificado con el liberalismo político y eso se vio en muchas de sus sentencias. Era la "Corte de Alfonsín", aunque es claro -especialmente por lo que ocurriría unos años después- que mantuvo una considerable independencia y marcó una época. El 29 de agosto de 1986 falló en el caso Bazterrica. Gustavo Bazterrica era ex guitarrista de La Máquina de Hacer Pájaros y de Los Abuelos de la Nada, y tuvo un problemita legal por unos souvenirs (2) de cannabis que transportaba en el momento menos indicado y en el lugar menos preciso para fumárselos luego, cosa que obviamente no pudo hacer (pero cuyo resultado constituye hoy un ícono en la casuística argentina).

La Corte enfocó el caso centrándose en la cuestión de la constitucionalidad en juego y desoyó el dictamen del procurador, Juan Octavio Gauna, que se remitía al canon precedente. El voto de la mayoría fue el de Enrique Petracchi, Augusto Belluscio y Jorge Bacqué. En disidencia votaron los jueces José Severo Caballero y el eterno Carlos Fayt, de quien se dice -curiosamente- simpatiza con el socialismo. En una interpretación del art. 19 de la CN la Corte sostuvo que no es posible exigir que se prohiba una conducta que se desarrolle dentro de la esfera privada, entendida ésta no como la de las acciones que se realizan en la intimidad -protegidas por el art. 18- sino como aquellas que no ofendan al orden o la moralidad pública, esto es, que no perjudiquen a terceros. Las conductas del hombre que se dirijan sólo contra sí mismo, quedan fuera del ámbito de las prohibiciones." (cons. 8°) Y opinó que "en el caso de la tenencia de drogas para uso personal, no se debe presumir que en todos los casos ella tenga consecuencias negativas para la ética colectiva. Conviene distinguir aquí la ética privada de las personas, cuya transgresión está reservada por la Constitución al juicio de Dios, y la ética colectiva en la que aparecen custodiados bienes o intereses de terceros. Precisamente, a la protección de estos bienes se dirigen el orden y moral pública, que abarcan las relaciones intersubjetivas, esto es acciones que perjudiquen a un tercero, tal como expresa el art. 19 de la Constitución Nacional aclarando aquellos conceptos."

Y como una refutación al criterio seguido en Colavini, el juez Petracchi (recomiendo leer su voto, especialmente el cons. 18°) concluye que el riesgo de tipificar un delito por la inclusión en el tipo de la situación misma de daño que la acción ilícita produce, lleva a la confusión de transformar a la víctima de un hecho ilícito en su coautor. En otras palabras: es una realidad que el delito más extendido es el que atenta contra la propiedad, especialmente el de robo y de automotores. Seguir el criterio en Colavini sería penar a los propietarios de automotores ya que ser dueños de vehículos es condición sine qua non para que luego sea posible robarlos. Si no hubiese dueños de autos, no sería posible la existencia del ilícito. De la misma manera, oponerse a delitos contra la integridad sexual no puede conducir a la prohibición de determinado atuendo o el exilio de las personas atractivas (puesto que ellas resultan indispensables para que su integridad sea atacada); algo verdaderamente ridículo.

Y luego llegó la maniobra por excelencia en la construcción organizada del delito: en la Presidencia de Carlos Menem se amplió el número de jueces a 9 y se garantizó una mayoría automática para lo que hiciese falta. Y llegó el fallo Montalvo, que contradice a Bazterrica y Capalbo y que retrotrae a Colavini.

El ciudadano Montalvo intentó descartar una bolsita con marihuana (2,7 gr.) cuando estaba a punto de entrar en una comisaría a la que era llevado por otra cuestión, fracasando en el intento. Ese acto lo inmortalizó luego la Corte el 11 de diciembre de 1990 al expedirse sobre el caso. El argumento reelabora la interpretación y alcances del art. 19 CN y antepone salud pública y voluntad general (!) al derecho autónomo de cada uno sobre su salud y a su voluntad particular. Presenta la tenencia de marihuana para consumo personal como un acto que menoscaba la salud general y se permite renovar la cuestionable vinculación lógica entre consumidor y narcotraficante (la igualación de la variante Colavini). El voto de la mayoría (7) contó con Ricardo Levene (h.), Mariano A. Cavagna Martínez, Carlos S. Fayt (por su voto), Rodolfo Barra, Julio S. Nazareno, Julio Oyhanarte y Eduardo Moliné O'Connor; en disidencia (2) votaron Augusto C. Belluscio y Enrique S. Petracchi (que habían compuesto la mayoría en Bazterrica).

Lo que hoy ocurre, generalmente, es que las causas que se inician se dejan prescribir. O, se indica un tratamiento de curación, según lo dispuesto en la 23.737. El 15 de febrero de 2008 un tribunal se pronunció nuevamente por la inconstitucionalidad y dos miembros de la Corte anticiparon que el cuerpo trabaja en la resolución de un nuevo caso, presumiblemente en sintonía con el criterio utilizado en Bazterrica.

TRES:
Sobre el uso de sustancias psicoactivas conviene recuperar cierto criterio de crítica, muy adormecido por lo habitual que resulta su uso. Durante el día consumimos infusiones muy potentes como estimuladores: mate, café, té, cacao, alcohol, bebidas "energizantes" sintéticas, medicamentos de venta libre y no tanto hijos del pésimo hábito de la automedicación y especialmente tabaco. Todas legales. Pocos saben que en el mundo mueren más personas fumadoras de cigarrillos que el conjunto de personas que mueren por consumir todas las drogas que están ilegalizadas. Las muertes por tabaquismo superan a las del conjunto del total de las demás sustancias.

Nunca me canso de recomendar la lectura de algunos artículos del Dr. Aquiles Roncoroni, profesor emérito de la UBA y eximio neumonólogo (puede leerse éste, subido al blog). "No es aceptable, dice Roncoroni, por ejemplo, que se insista que el uso de marihuana es la puerta de entrada para la cocaína. Los estudios demuestran que el denominado factor de riesgo es grande no porque los consumidores de marihuana usaron luego cocaína --solo una minoría lo hizo--, sino porque la mayoría de los usuarios de cocaína emplearon antes una droga más popular. Es probable que también consumieran alcohol y tabaco. La marihuana no provoca cambios químicos cerebrales favorecedores del consumo. Es que los propensos usan distintas drogas."

El historiador español Antonio Escohotado escribió que "La toxicidad de la marihuana fumada es despreciable. No se conoce ningún caso de persona que haya padecido intoxicación letal o siquiera aguda por vía inhalatoria, dato que cobra especial valor considerando el enorme número de usuarios cotidianos. Lo mismo puede decirse de la vía digestiva, donde hacen falta cantidades descomunales (varias onzas) para inducir estados de sopor profundo, que desaparecen durmiendo simplemente. A mediados del siglo XIX se llegaron a inyectar hasta 57 gramos de extracto de líquido de cáñamo en la yugular de un perro que pesaba 12 kilos, buscando la dosis mortífera del fármaco; para sorpresa de los investigadores, el animal se recuperó tras estar inconsciente día y medio." (Antonio Escohotado, Historia de las drogas, web).

Lo que genera ruptura de los lazos sociales es la desigualdad. La pérdida de sentido, la ausencia de proyecto, el vacío que deja el consumismo o la frustración de no poder consumir vuelve vulnerables a las personas. Una consecuencia puede ser la adicción a drogas duras (es redundante, las duras son aquellas que generan dependencia psico física).

Y la inseguridad, tan mentada y tan poco explicada, tiene mucha mas relación con el crimen organizado que con el consumo personal. Buenos Aires es una ciudad con un centro de 3 millones de personas, pero con una extensión que la transforma en una megalópolis de al menos 13 millones. La inseguridad en este espacio tiene un origen fácilmente identificable: no es la pobreza sino el delito organizado la verdadera amenaza. ¿Y de que hablamos cuando hablamos de crimen organizado en la zona metropolitana? Hablamos de una asociación ilícita de tres patas: una pata en el sistema de justicia –tanto estatal como de particulares-, otra en el sistema de las fuerzas de seguridad y otra –determinante- en el sistema político. El narcotráfico se monta sobre esa red.

style="font-size:100%;">Empecemos por desarticular esa connivencia. Eso es atacar la profundidad de las cosas. Penalizar a quienes consumen me parece irracional, ineficáz y especialmente hipócrita.

JMG
(este post no refleja necesariamente la opinión del resto de los compañeros/as docentes de la Comisión 12)

martes, 3 de febrero de 2009

Se ahogó en un vaso de humo

Hace unos días se difundió una foto del nadador estadounidense Michael Phelps fumando marihuana con una sofisticada pipa de agua durante una fiesta universitaria. La publicación de la foto ya es un tema en sí mismo: en nuestra legislación existe un derecho a la intimidad (el famoso habeas data del art. 1071 bis del CC) y el caso merece un análisis desde muchas perspectivas de interpretación.

Pero la pregunta es otra: ¿Cuál es el problema con que alguien, cuya disciplina mental y corporal lo llevaron a ganar 14 medallas de oro en los Juegos Olímpicos, 6 en Atenas 2004 y ocho en Pekín 2008, en un ambiente amistoso se fume unas pitadas de esa pipa?

El deportista podría haber reaccionado señalando la nimiedad en el origen del escandalo. Sin abandonar un discurso responsable (es decir, no apologético pero mucho menos cobarde) tenía una oportunidad para señalar cuestionamientos a una sociedad en la que torturar en cárceles clandestinas era hasta hace poco legítimo y necesario pero no lo es tanto consumir en una oportunidad y con dominabilidad de conducta una droga blanda, es decir, no adictiva.

Phelps siguió otro camino. Se disculpó y calificó de "lamentable" su comportamiento. Emitió un comunicado, publicado por el diario USA Today, y dijo que fue un "error de juicio". Una lástima, retrocedió en chancletas cuando la pileta todavía le quedaba lejos.

jueves, 8 de enero de 2009

Lugar común la muerte


Las noticias que vienen de Palestina son desoladoras. Entre tanto comentarista de cabotaje (la aparición de las grandes empresas de multimedios en la Argentina ha empobrecido notablemente el oficio de periodista) se destacó un hondísmo artículo del filósofo León Rozitchner. Comenzaba así: "¿Recuerdan cuando hace dos mil años los judíos palestinos, nuestros antepasados en Massada sitiada, enfrentaron las legiones del Imperio romano y se suicidaron en masa para no rendirse? ¿Recuerdan la rebelión popular y nacional de nuestros macabeos contra la invasión romana, cuando murieron decenas de miles de judíos y se acabó la resistencia judía en Palestina y nos dispersamos otra vez por el mundo? ¿No piensan que esa misma dignidad extrema que nuestros antepasados tuvieron, de la que quizá ya no seamos dignos, es la que lleva a la resistencia de los palestinos que ocupan en el presente el lugar que antes, hace casi dos mil años, ocupamos nosotros como judíos? ¿No se inscribe en cambio esta masacre cometida por el Estado de Israel en la estela de la “solución final” occidental y cristiana de la cuestión judía? ¿Han perdido la memoria los judíos israelíes? No: sucede que se han convertido en neoliberales y se han cristianizado como sus perseguidores europeos, que, luego de exterminarlos, empujaron a los que quedaron vivos para que se fueran a vivir a Palestina con el terror del exterminio a cuestas."


Robert Fisk, en The Guardian, parece otra opción para aproximarse a la coyuntura desde el fondo de las cosas. Su nota aquí.
Digamos por último, y sólo por el momento, que la mitad de las 680 víctimas mortales que ha dejado hasta el momento la ofensiva militar israelí en la Franja de Gaza son mujeres, niños y jóvenes menores de 18 años. Esto lo aseguró hoy en Jerusalén una portavoz de la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinacón de Asuntos Humanitarios (OCHA).
No estaba equivocada Hannah Arendt cuando sostenía que la eventualidad de un genocidio vive inscripta por siempre en el presente Moderno.

viernes, 19 de diciembre de 2008

alto medio bajo

En un enjundioso comentario al post "Finales", Demián G. C. (DGC) formula algunas cuestiones que intentaré responder, sin escapar a una comprensible brevedad. En él, se pregunta si los sectores "alto" y especialmente "medio" deben amparar reclamos de los menos favorecidos y si en el caso de hacerlo, no estarían por ello minando su propio estandar de vida. Ello en el marco de lo que llama una desnaturalización del conflicto en la comunidad política.

UNO
Siempre es alentador para los docentes saber que motivan laboratorios en los estudiantes.

DOS
Con respecto a la referencia que DGC hace a la clase en la que hablé de los edificios y la ciudad, pienso que es un tema excelente, como símbolo y síntoma, analizar las implicancias que tiene para el espacio público en una ciudad -que también es comunidad política autónoma- la emergencia de un modelo de vivienda conocido como torre country. Este artefacto está plagado de mitos y externalidades negativas. Me remito a esta nota y también a ésta, publicadas en Café de las Ciudades, la que considero como la mejor publicación argentina sobre un urbanismo inteligente y transdisciplinario.

TRES
El concepto central de DGC parece ser el de " desnaturalización del conflicto en la comunidad política. Como es obvio, ésto requeriría de mayor precisión analítica. Por lo pronto, parece sostener que existe un conflicto natural y otro des-naturalizado. ¿Qué quiere decir que existe un conflicto natural? Naturaleza es perfección (Aristóteles), para otros reglas últimas inexistentes o desconocidas (Rorty), para otros un sustrato sobre el cual las personas tejen relaciones causales que llaman leyes pero cuya conexión es pura superstición (Wittgenstein), y un infinito etc. Por lo tanto, la de DGC es una hipótesis que requiere fundamentación (también es comprensible que eso no se haga en un comentario de un comentario).

CUATRO
Tengo mis dudas si el punto de partida, como también surge del comentario, se origina en estratificaciones "alto-medio-bajo", que son retratadas como bloques pétreos y homogéneos, sin consideraciones sobre lo que ocurre al interior de las clases y sobre cómo llegaron a articularse como tales. En ese esquema, el conflicto natural (como auténtico) es el de altos v. bajos, reactualización de grandi v. poppolo. Los sectores medios, así, son una especie de interferencia desnaturalizadora.

Sobre algunos problemas de estas concepciones unidimensionales, la sociología moderna hizo muchos y muy buenos aportes. El primer enfoque crítico de las concepciones unidimensionales que puedo nombrar es el del marxismo analítico, tomando particularmente como autor a Erik Olin Wright. El segundo, el del constructivismo estructuralista, expresado en la voz de Pierre Bourdieu (muy bueno “Espacio social y poder simbólico” en Cosas dichas. Gedisa. Barcelona. Septiembre de 1996).

CINCO
También emerge una afirmación moral. Me refiero al "deben" que utilizas como expresión. Si tal o cual sector debe. Por un lado me veo tentado a decir que tal moralidad (pública) no es predicable para clases; que lo central es un juego inmanente de relación de fuerzas y no una tensión moral. Que los apelativos morales trafican propósitos velados, que me remiten al concepto de unione que tan bien detectó Maquiavelo.

Pero luego, situándome en una preferencia por los menos favorecidos, hasta estaría dispuesto a aceptar que la dimensión moral (pública) pueda ser parte en la discusión. Y, para continuar esa concesión deliberativa, me parece que en el espacio del liberalismo político (variante igualitarista/bienestarista) el que mejor planteó las cosas fue John Rawls. De manera hiperbreve (apelo a una imperfecta memoria) sus principios de Justicia se enuncian así: 1) cada persona tiene un derecho igual e irrevocable a un esquema de libertades básicas iguales que sea compatible con un esquema igual para todos; 2. Las desigualdades económicas y sociales, sí y sólo sí pueden ser moralmente justificadas si: a) los diferentes cargos y posiciones son accesibles a todos en condiciones de equitativa igualdad de oportunidades y b) que redunden en el mayor beneficio de los integrantes menos favorecidos de la sociedad.

He aquí un criterio sobre lo justo. Y agreguemos dos cosas. A mí sí me importa la individualidad. Postular acciones colectivas no implica desconocer esta dimensión. En segundo lugar, aunque Rawls está inscripto en la tradición del liberalismo político, surge con claridad que la cuestión igualdad está en el centro de su criterio de justicia. Y que, tal vez antes del primer principio, podríamos sin dificultad ubicar una indispensable prioridad: la existencia de bienes primarios, aquellos a los que ningún ser racional renunciaría y que los ciudadanos necesitan como personas libres e iguales que viven una vida completa (en Justice as Fairness).

SEIS
Hechas estas observaciones sobre algunas cosas dichas y sobre otras no dichas en el exigente y complejo comentario, voy directamente a las preguntas. DGC dice "Me pregunto si los estratos medios y altos deben amparar el reclamo de los estratos bajos. (...) ¿se dan cuenta estos sujetos [clase media] que amparar un reclamo de los estratos bajos significa un ataque al fundamento de su entorno de vida? (...) si fuera efectivo el planteo y el amparo a los estratos bajos estaría minando sus privilegios."

Bien, no se trata de un deber. Pero podrían motivarse en principios de justicia como el de Rawls. En definitiva, es la frontera mínima de legitimidad para una sociedad bien ordenada. Cualquier planteo liberal actual que lo desconozca, para mí carece de seriedad. Rawls mejoró notablemente esa tradición. Además, generó un diálogo que también perfeccionó nuestras inclinaciones republicanistas y con el que se verificaron enormes convergencias con la otra gran tradición: la democracia.

De los grandi digamos que actúan como casi siempre. El espíritu de la renta desconoce toda lógica solidarista. Por el contrario, creen que la desigualdad debe existir y que es bueno que así sea.

Con respecto a los sectores medios, pienso que es exactamente al revés de como lo plantea DGC. Es decir, su posición de demanda sería mucho más eficáz si constituyera un bloque con sectores populares. Esto lo vio muy bien Antonio Gramsci. Remitámonos a él en esto. Le iría mucho mejor en la pugna distributiva, no tengo ninguna duda. Es verdad, debería resignar algunas cosas para ello, pero en lo general le iría mejor. Hay evidencias históricas en nuestro país, cuando todavía éramos una sociedad de semejantes.

Lo que amenaza el entorno de vida de los sectores medios es ser cada vez más refractario a las necesidades populares y no ser permeable a ellas. Componer, -con esa inestimable ayuda de las empresas que venden publicidades, propaganda y en último lugar noticias- la entente de la demanda de poder punitivo, la ciudad blanqueada, la que piensa que el actual Jefe de Gobierno está haciendo una buena gestión...

Claro que es difícil que entiendan esto. Es más facil focalizar en el asaltante que en un decreto del poder ejecutivo, en una mala sentencia o en un fraude corporativo. La Universidad casi no se hace escuchar (y puertas adentro hay una mediocridad creciente disfrazada de lucha) y con el secundario solamente no alcanza para poder interpretar algunas cositas determinantes que son la causa de lo que nos pasa (y hacemos).

Un 19 de diciembre, pero de 2001, esta clase media gritaba "piquete y cacerola, la causa es una sola". Ahora, si indagamos en profundidad, quisieran prisión perpetua para todos los delitos -que siempre son pensados como delitos de los que menos tienen hacia ellos, error-. Por eso, alguna vez en mi vida batí parches y redoblantes, cacerolas never.


sábado, 13 de diciembre de 2008

Finales


Recuerden que el final es este próximo martes 16 de diciembre a las 10 de la mañana.
El aula la conoceremos consultando la cartelera que está frente a la sala de profesores de PB.
Quienes hayan promocionado podrán hacer firmar sus libretas, debidamente completadas.

viernes, 12 de diciembre de 2008

Billetes para un lado, balas para el otro


1) Aparece reactualizada la polaridad grandi - poppolo. Pero especialmente la diferencia de capacidades de influencia o poder que muy bien observó Maquiavelo en el siglo XVI. En una semana, salió con fritas una "repatriación de capitales". (¿Tienen patria?) Novedad absoluta, pero no. No se trató de eso sino de un "blanqueo de capitales" (por qué será que se habla de blanco cuando se trata de dinero sucio, feo y malo) o lisa y llanamente de un "lavado de dinero" (importante delito penal-económico). No puede esperarse algo mejor de una cúpula de negocios que se "forma" en una escuela del delito leyendo cositas como ésta, en una página propiedad del multimedios de la Trompetita.

También se habló de ésto otro para los Grandi. A propósito, ¿Se imaginan cuántos robos y hurtos callejeros hacen falta para reunir un botín de cincuenta mil millones de dólares? (éste, que no es un desamparado, lo logró).

En cambio, para los muchos, un destino seguro puede ser el de ésta nota, y -en medio de un terror mediatizado- puede que no se salven ni los payasos buenos.

2) Ésta semana, en un final de derecho penal, expuse sin obtener mayor curiosidad del docente, la "ventana" que supone para el dispositivo jurídico penal la entrada en él de la cuestión social. Es una ventana, es verdad, pero utilizada con el sentido de equidad como auxilio de la justicia, puede en manos de un juez/a amortiguar un poco las diferencias que existen entre ciudadanos desigualmente libres en una sociedad desigualmente ordenada. Es el famoso y controversial tandem de los artículos 40 y 41° del Código Penal. Leanló con imaginación, después me cuentan.

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Siempre hablamos de Atenas

En Grecia, el homicidio de un joven por balas legales condujo a una reacción generalizada de protestas, huelgas generales y disturbios con tono bastante hot. ¡Qué gente, éstos atenienses! Con una democracia tan pero tan viejita todavía no aprendieron a estarse quietos.

Nosotros, en cambio, tenemos una democracia de apenas 25 años. Y por eso hacemos marchas por los jóvenes, pero para que estén tras las rejas (si son menores, mejor todavía). Y muchos PIMTi´s (Porteño-de-Instrucción-Mínima-Tinellizado) quiere reja y quiere bala sin garantías y le parece que hay libritos (objeto extraño) que ya están desactualizados.

Vengan al conurbano bonaerense, al centro de la Ciudad, para qué mirar hacia afuera si los griegos hace mucho que están demodeé.

jueves, 27 de noviembre de 2008

"El examen, desde un alumno"

Hace un tiempo, ese excelente tipo que es el matemático y profe de la UBA, Adrián Paenza, escribió un artículo que les recomiendo leer (y comentar a partir de la experiencia de cursada). "Un maestro, un profesor, es quien asume –entre sus tareas– la de averiguar si los alumnos estudiaron, se prepararon, si comprendieron, si dedicaron tiempo y esfuerzo... En pocas palabras: si “saben”. Pero en general, nos debemos a nosotros mismos una pregunta: ¿los interesamos antes? ¿Quién tiene ganas de dedicar su tiempo, su energía y esfuerzo a algo que no le interesa? ¿Sabemos los docentes despertar curiosidades? ¿Quién nos preparó para eso? ¿Quién nos enseñó o enseña a generar apetito por aprender? ¿Quién se preocupa por bucear en los gustos o inclinaciones de los jóvenes para ayudarlos a desarrollarse por allí?"

martes, 25 de noviembre de 2008

La lucha final


Será el próximo 16 de diciembre, a las 10 de la mañana. Las personas que sobrevivieron al cuatrimestre (promocionaron), podrán poner sus papeles al día en esa fecha.

El examen final es oral. Para evitar esto, cuentan con unas 456 horas desde este momento para entrenar. Se los decimos, no con afán persecutorio, sino para que vean que es perfectamente posible realizar una exposición honorable sin pasar mayores sobresaltos.

El programa sobre el que serán evaluados/as lo conocen: es el cronograma de clases prácticas.

viernes, 31 de octubre de 2008

monarquía y homofobia


Hoy, en The Nation, publican una nota con declaraciones de una señora mayor, la Reina Sofía de España. Habría declarado que "Si esas personas [los homosexuales] quieren vivir juntas, vestirse de novios y casarse, pueden estar en su derecho, o no, según las leyes de su país: pero que a eso no lo llamen matrimonio, porque no lo es. Hay muchos nombres posibles: contrato social, contrato de unión".
A los republicanos nos importa poco lo que diga la monarquía, pero de vez en cuando hay que volver a tirarlos por la ventana (metafóricamente, claro). Lo central aquí es analizar dos cuestiones ligadas claramente a la teoría política: 1) el lenguaje y sus implicancias; 2) la cuestión del derecho a tener derechos (y que derechos iguales se llamen de igual forma).

1) Cuando hablamos utilizamos palabras cuyo sentido y significado dependen del juego de lenguaje en el que estén insertas. Por eso mencionamos a Ludwig Wittgenstein en las primeras clases. Una palabra posee múltiples usos, significados y -si la palabra es un verbo- es muy probable que con ella podamos referirnos a un vasto conjunto de diferentes acciones. El término pensar es un buen ejemplo.
Y cuando alguien nos dice "política", "amigos" o "Racing Club", automáticamente encuadramos la palabra en una caja de sentido que ya teníamos.
Si la palabra es matrimonio, el encuadramiento al que muy rápidamente irá a ubicarse se compone de dos prenociones bastante arraigadas en sociedades judeocristianas: santidad y familia heterosexual. Aquí empieza la cosa porque se activa un estereotipo de lenguaje. Y aunque la mayoría de las personas no sean homofóbicas, asocian matrimonio con sexo (entendido como diferencia entre varones y mujeres).
Veamos qué ocurre si hacemos una definición distinta de matrimonio (que a mi me parece mucho más precisa, sin importar la identidad sexual de sus integrantes): "El matrimonio es una institución social que representa un compromiso público de amor entre dos personas para toda la vida (mientras sigan amándose)" ¿Qué tiene que ver aquí si esas dos personas son de la tribu heterosexual, gay, lesbiana, travesti, transexual, transgénero, bisexual, eh? No es lo relevante en esa definición. Pasemos a la cuestión de los derechos.

2) La pregunta puede hacerse de una manera distinta a como la hacen sistemáticamente los conservadores (¿estás a favor del matrimonio-gay?) Por ejemplo: "¿Estás de acuerdo con el matrimonio entre personas de un mismo sexo?" Antes de seguir: siempre puede decirse que sí sin preocuparse por la forma (encuadramiento) de la pregunta, como también decir que no porque -por ejemplo- hay gays a los que no les interesa la forma (institución) matrimonio.
Lo que queremos mostrarles, más allá de la cuestión del matrimonio específicamente, es el ejercicio sano y crítico del cambio de encuadre cuando percibimos una carga oculta de intencionalidad en él. Un ejemplo sería contestar: "Yo creo en iguales derechos entre ciudadanos/as. Y no estoy dispuesto a que el Estado o alguna otra organización me digan con quien puedo o debo casarme y con quien no. El matrimonio tiene que ver con un compromiso público de amor entre dos personas. Negarle ese derecho a casarse a dos personas es una violación a la dignidad humana. ¡Suck that tangerine, nabo!"

Mucho de esto puede leerse en No pienses en un elefante. Lenguaje y debate político buenísimo librito de George Lakoff.

Nota after Obama: Los demócratas ganaron California. Sin embargo, en esa jornada también se votó (resultó 70 a 30) una enmienda que prohíbe todo matrimonio que no sea heterosexual. En éste artículo, Mariana Enríquez busca algunas razones para intentar comprender.

martes, 21 de octubre de 2008

Plan de lectura sobre Maquiavelo

De los Discursos sobre la primera década de Tito Livio, leer:

Libro I:
Capítulos: 1,2,3,4,5,6,7,8,9, 11, 12, 16, 17, 18, 25, 26, 34, 40, 43, 47, 55 y 58.

Libro II
Capítulos: 1, 2, 3 y 29.

Libro III
Caps: 1,7, 8, 9, 28, 34, 37 y 41.

Vamos a verificar el cumplimiento de la lectura en todas las clases.

El derecho, la protesta social y el espacio público

Sobre el final de la clase de hoy hice un apurado comentario sobre la protesta social y la cuestión de la visibilidad. Sumo alguna bibliografía como esta, esta, y esta.

martes, 14 de octubre de 2008

Fraternidad


Hay personas que se aproximan a la santidad sin haberse ido del mundo de las cosas. A veces, nos cruzamos con ellas. Otras, las conocemos de oídas.
Alegría Intensiva es una Asociación Civil sin Fines de Lucro dedicada a llevar alegría a niños enfermos u hospitalizados, sus papás y profesionales de la salud, a través del arte clown.

lunes, 13 de octubre de 2008

El asombro de Borges


Hoy asistí a la primera jornada del Seminario Internacional Políticas de la Memoria dentro de lo que fue un centro clandestino de detención y exterminio en Buenos Aires, la ESMA.
Horacio González, profesor de nuestra Facultad, mencionó en su exposición un artículo escrito por Jorge Luis Borges tras presenciar una jornada del juicio a las Juntas Militares en 1985, durante el gobierno del ex presidente Alfonsín. Es un texto poco conocido y sobre un tema siempre controversial como es el de este escritor con la pasada dictadura.
Lo encontré y lo leí. Aquí pueden verlo ustedes, es muy bueno.

domingo, 5 de octubre de 2008

Atilio, muy duro con el CIAterrorismo

Las recientes revelaciones de la CIA, al abrir sus archivos de los últimos 25 años, permiten apreciar en toda su perversidad la íntima conexión existente entre terrorismo e imperialismo. Leer más.

Parciales: un caso para el licenciado Juan Estrasnoy

Hemos corregido los parciales. La lectura de los mismos, en ciertos casos, nos ha traído a la memoria el célebre estudio realizado por este especialista en educación. No queremos generalizar, pero hubo casos prototípicos.

jueves, 2 de octubre de 2008

Cuando una mujer dice no, es no.

Y cuando dice que sí, es . Y por eso no se explica que su autonomía y voluntad tenga que someterse a las presiones del fanatismo, la judicialización innecesaria y las moralidades subjetivas y particulares de los magistrados.

El Código Penal despenaliza el aborto en el 2º párrafo de su art. 86. Pese a ello, en los últimos años han tomado estado público situaciones en las que mujeres que se encontraban en alguna de las circunstancias previstas en la norma, tuvieron que enfrentar barreras para acceder a la realización de un aborto legal.

Este es un tema muy importante, complejo y que requiere de una amplia y democrática deliberación. Algo demasiado importante como para dejar en las manos exclusivas de Bergoglio, Bergman,Pando o el Torquemada Castrense.